Me despierto en lo que parece ser una especie de balsa, un poco mareado y sin entender muy bien que pasó. Aunque sé que hubo un accidente no logro recordar muy bien por ahora cómo fue que ocurrió. Trato de incorporarme para ver dónde me encuentro y me doy cuenta que me duelen todos los músculos, quien sabe hace cuanto que estoy aquí tendido.Lo único que diviso a mí alrededor es agua y más agua, trato de no ponerme nervioso pues no puedo perder la cordura, es lo único que me queda.
Busco los remos de la balsa pero no los encuentro. la imagen de una tormenta se mezcla en mis pensamientos, tal vez esté empezando a recordar de apoco. Me concentro en cómo voy a hacer para moverme sin tener que bajarme del bote, así que trato de tumbarme y remar con mis manos pero un dolor agudo recorre todo mi cuerpo desde la espalda hasta los pies, me doy cuenta que tengo una herida en mi espalda de la cual aún no me había dado cuenta, en realidad no me puedo mover mucho pues el dolor es casi insoportable.Creo que me he quedado dormido de nuevo o tal vez me desmaye no lo recuerdo en realidad, pero ahora el sol ya está en el horizonte y la noche no tarda en llegar. Trato de incorporarme despacio tratando de no sentir de nuevo tan horrible dolor, y fijo mi vista a mi derecha pues creo ver árboles muy grandes a lo lejos, en seguida vuelvo a tumbarme en el bote y comienzo a dar todas mis fuerzas para remar hasta allí pues la marea me debe de haber llevado hacia la costa y ahora dependerá de mi poder llegar hacia la orilla. El dolor de todo mi cuerpo es insoportable y parece que nunca voy a poder llegar, agotado por el esfuerzo descanso un poco los brazos pero me doy cuenta que las olas me devuelven al mar. Comienzo a remar de nuevo esta vez repitiéndome una y otra vez que no es mi hora de morir y que solo debo hacer un esfuerzo más, solo un poco más, mis manos congeladas por fin tocan arena parece que por fin llegué.
Ahora la adrenalina que corre por mi cuerpo por la alegría de encontrar tierra firme hace que me olvide por un instante del dolor tan agudo. Me bajo como puedo de la balsa y trato de empujarla hacia la arena, a la vez que me caigo rendido jadeando de dolor y cansancio. La alegría desaparece de apoco pues comienzo a mirar a mi alrededor y lo único que veo son árboles y arena, los pensamientos viajan más rápido que mi vista y comienzo a pensar en dónde me encontraré, si hay animales salvajes, si alguien me estará buscando, si alguien alguna vez me encontrará perdido en ese lugar.
Mis pensamientos fueron acallados repentinamente cuando me di cuenta que tenía muchísima sed, pasé mi lengua por mis labios y estos se encontraban todos cuarteados ha de ser el sol y el agua salada que me han dejado en tan malas condiciones mi boca, solo podía pensar en conseguir agua de la cual pudiera tomar.
Decido ir en busca de alguna fuente o lago pero al incorporarme noto que no lograba ver más allá de unos cuantos metros, no puedo meterme en medio de ese bosque pues si hay algún animal salvaje estaría en serios problemas. Tome la balsa y la coloque en el árbol más cercano, me acurruque debajo y casi sin darme cuenta me quedé dormido.
Cuando me desperté noté que la balsa no estaba, tal vez un viento en la mañana la habría hecho volar quien sabe en dónde, ahora mi única inquietud era tratar de conseguir alguien y sobre todo algo que beber.
Al comenzar a caminar noto que el paisaje era muy hermoso y a la vez desolado, me dio la sensación que el dolor de la espalda aumentaba al caminar y mis brazos comienzan a entumecerse, que bien me haría en este momento las vacaciones que tanto quería mi mujer. Mientras pienso en ella y en lo hermoso que sería volver a verla continúo buscando agua o algo que pueda beber y veo unas ramas que tienen unas hojas muy grandes que contienen en el medio lo que parece ser agua de lluvia. Me tumbo al piso y trato de volcar en mi boca la mayor cantidad de agua posible. Se siente como el mejor refresco que haya tomado en mi vida. Ahora me dedico a beber lo que más pueda del resto de las hojas. No fue mucho en realidad lo que bebí pero creo que es suficiente para hidratarme por ahora.
Decido seguir caminando pero tratando siempre de no alejarme demasiado de la costa pues es allí en dónde tendré oportunidad de que en algún momento alguien me encuentre.
Bordeando la costa trato de encontrar alguna planta que me pueda servir de alimento y que pueda llevarme con migo,y ramas secas que me puedan servir para hacer fuego aunque en realidad no tengo idea si podré recordar cómo es que se hacía.
Una vez que recolecté algunas hojas verdes y yesca con algunas ramas decidí volver al árbol que me sirvió de techo para dormir. Estoy horas tratando de prender alguna clase de fuego por más mínimo que sea y al parecer no es tan fácil como parece o al menos como te lo muestran en los clásicos programas de supervivencia en dónde el protagonista lo hace en menos de cinco minutos.
La noche otra vez se acerca sin que tenga nada que me dé algo de calor así que me acurruco y decido dormirme sin pensar en el dolor y el frío de la noche. Al caer la noche escucho unos sonidos muy tenebrosos y sacados de la peor película de terror que provienen de los árboles que tengo detrás realmente me asusta bastante pensar que algún animal esté haciendo esos ruidos extraños. Trato de no prestar demasiada atención a los sonidos y tarareo una canción que días atrás me había pasado un amigo al celular y como toda canción que no te gusta se te queda pegada por días en tu cabeza sin entender el porque. tarareo la canción una y otra vez acurrucado esperando dormirme. Un dolor me despierta súbitamente sin que pueda razonar que es lo que me está pasando, siento como me están devorando mi brazo de apoco, forcejeo y lucho pero el animal es muy grande y no puedo evitar que me derribe y comience a comer todo mi cuerpo siento un dolor tan inmenso en todo mi cuerpo y ruego una y otra vez morirme rápido para dejar de sentir el dolor intenso que siento en este momento.
Comienzo de apoco a dejar de escuchar los desgarros de mi cuerpo y empiezo a ver una luz blanca segadora que trae la imagen de mi mujer y mis hijos jugando en el frente de casa, me acerco despacio hacia ellos y la luz se vuelve segadora. Estoy seguro que esto es la muerte y siento alivio de no sentir ningún dolor en mi cuerpo así que me relajo y me dejo ir serenamente. De repente me despierto por unas sirenas fuertes insoportables, Que es eso? Dónde estoy? Toco mi espalda, no hay herida, miro a mi alrededor y veo gente, personas! Corriendo para todos lados y allí en ese instante me doy cuenta, no puede ser cierto otra vez está pasando entonces fue un sueño! –El Barco se hunde! Me dice una señora que la reconocí en seguida… ¿otra vez? ¿Qué hago? Todo comienza de nuevo…. Salgo corriendo y veo el bote, mi bote… dios mío todo comienza de nuevo! Mientras el barco se hunde las personas que estaban a mi alrededor ya se han tirado y yo de nuevo solo tomo la balsa y pienso si en realidad lo viví o fue tan solo una visión de lo que me pasará...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario